Toda la estancia huele a azahar. He cortado ramas de los naranjos amargos que lucen florecidos y los he colocado en agua por distintos lugares. Es un olor único, que se cuela en el espíritu y consigue renacer la primavera desde dentro del corazón.
Azahar, dulce azahar, mágico azahar.
1 comentario:
Azahar de mi tierra.
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