(Imagen de Aquí)
Noté como el amor se escapaba sin darme tiempo a retenerlo. No fui consciente de lo efímero que es todo, de que nada es eterno, de que puede llegar un día en que por sí mismo ejecute su vuelo y se eleve camino de otras dimensiones.
Lo dejé ir, no hice nada por retenerlo.
Posiblemente hacía tiempo que deseaba dejarlo libre.