Manos.
Se me antoja que las manos dicen de nosotros más que el rostro. Las mías son pequeñas, y hoy aparecen carmesíes y enrojecidas por el frío.
Parece que no lloverá esta noche. Mañana sólo habrá charcos de barro para que chapoteen los niños.
Creo que mojaré mis manos en ellos.
("Madre e Hija" - Stephane de Bourgies)
2 comentarios:
Bonita regresión y conversión; "mojar tus manos en los charcos donde chapotean los niños". Has captado varias imágenes fuertes en esta frase. Me gustó. Un abrazo.
Un placer que te haya gustado y que hayas pasado por mi blog.
Otro abrazo para tí.
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