Me gustan
los días plomos.
Hasta donde
me alcanza la memoria, recuerdo que siempre he sentido predilección por ellos.
Provocan en mí un estado se serenidad y recogimiento que me invitan a
enroscarme sobre mí misma y recrearme en aquello que me hacen sentir.
No importa
la estación del año, ni las situaciones por las que esté viviendo. Simplemente
me siento atraída por ellos.
Días plomos,
opacos, densos, del color del humo que se escapa por las chimeneas del
horizonte, pasados y presentes por siempre en mi vida.
Me gustan
los días plomos.
*Imagen de Willian Vanscoy
3 comentarios:
la verdad es que yo prefiero los días despejados, quizas porque el alma la he tenido ya demasiado tiempo como " un plomo" y me pesaba bastante, así que ahora me gustaria sentirme un poco más " ligera" y disfrutar de un poco más de claridad luminosa.
Besos, un encanto leerte.
Me gustan los días de los que hablas, por lo generan son los que me incitan a pintar.
Pero debo decir que soy de esas personas que prefieren el sol jeje.
Saludos.
Desde que te fuiste, todos los días de este mundo virtual han quedado plomos como te gustan, como quisiste.
Un beso donde quiera que estés!!
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